31 diciembre 2005

FRANZ FERDINAND + RAKES (22-12-05) Rockodromo - Madrid

Cambio de escenario para albergar al fenómeno indie-mediático de los dos últimos años y reventón increíble de gente en la fría noche de la Casa de Campo. Expectación por ver a los de Glasgow defender un repertorio escaso, 24 canciones en dos discos para una banda que ha entrado, gracias (aunque no sólo) a la pasión juvenil festivalera, de forma fulgurante en la división de las megaestrellas del rock británico. 

A lo largo de la hora y cuarto que duró la actuación, solventaron bien la escasez de repertorio, no desviándose de cmo suenan las canciones en el disco (sólo al final con "This fire" ruidosa y distor´sionante) ni la fórmula que les ha dado el éxito. Aunque el mérito dependiera más de unos fieles seguidores bien dispuestos al baile y la diversión, que para eso forman ya parte de los elegidos, esas bandas que ofrecen espectáculos más que conciertos. Porque espectacular fue la puesta en escena a lo grande con imágenes y efectos luminosos de los que se encargaban cuatro personas colgadas del techo del lugar. 

En cuanto a lo musical y dejando lo más posible al margen la locura colectiva -me parece un grupo sobrevaloradísimo que ha destacado más por actitud (parece que se llevan los chicos buenos) que por su sonido- me quedo como más destacable de la noche algunas canciones de su último disco como "Walk away" o "Eleanor, put your boots back on" canciones con más recorrido y donde se olvidan por esa obsesión constante por el baile que les hace caer en una efervescente alegría fácil y muchas veces mimética. Canciones como "Take me out" se hacen chirriantes a la segunda escucha en disco y aunque en directo funcionan ¡ claro ! oír algo que se salga de las pautas habituales en ellos, resulta oxigenante y realmente necesario para no esprimir hasta agotar la fórmula. En esa línea me pareció también acertada la inclusión cada vez mayor de teclados en las canciones con mucha presencia en el directo y dándole un toque "glam" por momentos. 

Buen concierto realmente para pasarlo bien y divertirse ¡ si ! pero sin sorpresas, apoyados en un alto volumen de sonido, en un espectáculo y recinto que no les hace convincente. Sin pretensiones por su parte, al menos no más del que su público quiera darles, del que me sorprendió que, aunque las primeras filas eran de jóvenes fans entregados, de mitad hacia atrás y en las gradas, la media de edad era bastante mayor a lo que se podría imaginar. Pensé que entregarse al éxito fácil era cuestión de edades tempranas... Telonearon Rakes, los de Brighton entretuvieron con un sonido demasiado cercano a los añorados Joe Division.

27 diciembre 2005

CHINGALEROS - PIOLINES (10-12-05) Siroco - Madrid

Auténtica fiesta la vivida en un abarrotadísimo Siroco ¡como en sus noches más calientes! esta entrañable y clásica sala nos hacía sudar de nuevo, aunque también tuvieron bastante que ver en ello Chingaleros que presentaban su tercer disco "Realese the apes" 

Una entrega del punk más cafre, oscuro y primitivo que puedas imaginar. Poco importaba que el sonido rebotara por techos y paredes hasta convertir aquello en un infierno, los hijos del Chingo adoctrinaron divirtiendo y en poco más de una hora nos presentaron un visceral punk de ultratumba, viciado y sucio. Chingaleros vienen de varias bandas del punk malasañero de los 90' y ahora que parece quedar poco de aquellas bandas, se presentan estos con un punk primitivo y embarrado "Crap the cut" mi favorita del disco, la más rasposa y tribal me hace recordar a Cramps. Noqueados acabamos y pringosos, con este nuevo soplo de aire sudado y sucio en las entrañas alcantarilleras de la capital.  

Pero el fiestón tuvo aperitivo, volvieron Piolines, el grupo más gamberro, atrevido y acelerado del que hace años no sabíamos nada. Vuelven y siguen como siempre, riéndose de todos y de ellos los primeros (esos monos amarillos) y como nos tenían acostumbrados, batiendo records, 30 canciones en 25 minutos, debieron ser 20 minutos pero las dos últimas canciones "Casi me mato" de Barón Rojo y homenaje a Macarena, habitual personaje de lo noche conciertera (cantó entre distorsiones la última) alargaron la actuación. Conté canciones de 20 segundos. 

Punk castizo, freaky y casposo. Delirante y surrealsita berreando a sus habituales personajes, "Forrest Gun" o "Chiquito" pero aun se atreven con temas y personajes nuevos "Teddy Bautista", "Zapatero", "Concejal" a ver si este concierto no se queda en anécdota y el regreso se alarga, pues desde su último disco "Buen provecho" (1998) 42 canciones en 38 minutos, hemos quedado huérfanos de hacedores contra la necedad. Abobados quedamos y alienados con los viejos aires de irrealidad que se picotean en las alcantarillas de la capital. Pues eso ¡tumbaos! como el chaval de la foto de arriba, entre monos y pollastres.

18 diciembre 2005

SLOAN - A sides win - singles 1992-2005 (Bittersweet Recordings)

¡Menuda sorpresa! repasar la discografía de esta banda de Nueva Escocia. Ahora que Canadá empieza a aparecer como referente musical actual, es grato comprobar que no es algo casual sino que ya en los 90' había bandas importantes como esta, haciendo grandes canciones y logrando superar adversidades pues aunque el éxito les llegó en su país, nunca salieron de allí por la reticencia a su sello inicial "Geffen" a apostar por una banda que se salía de los parámetros "grunge" del momento. 

Pop de guitarras brillantes y energéticas, con riffs rokeros y electrizantes, destacan en el la utilización de voces de todos sus miembros (siempre los mismos desde que formaron el grupo en la Universidad), que dan un toque de clasicismo a su pegadizos estribillos. Elegantes inclusiones de trompetas, pianos o vientos en momentos muy concretos y acertados. Melodías que se interrumpen y vuelven a despegar milimétricamente. Suelen intercambiarse los instrumentos y aunque firmen todas las canciones como Sloan, intuyo reparto de composiciones según quien canta en cada momento. Un grupo democrático que refleja estados de ánimo soleados. 

En la onda de bandas como The Posies, Redd Kross, Fountain of Wayne, Gigolo Aunts o The Lemonheads aparecen brillantes destellos que nos evocan a los clásicos: desde los Beatles hasta los Stones, pasando por ramalazos a lo Beach Boys, Birds... con momentos "Glam" y mucho de "Costa Oeste". Parece evidente si nos atenemos al DVD que acompaña al CD, donde aparecen todos los videos de los singles, en los que destaca en muchos de ellos la estética de los 60'. 

Acertada la inclusión de este DVD donde además de todos los videos, aparece un documental con los protagonistas repasando su historia a través de los mismos. Muchos dirigidos por ellos mismos destacando del buen nivel general, un genial "The other man" donde el suspense "Hitchcockiano" se tensa hasta el final. 

Como disco de "singles", se hace difícil destacar canciones, pues de principio a fin no hay nada que sobre, pero me quedo con "500 up", "People of the sky" o "Losing California", guitarreo, inmediatez, medios tiempos, energía... pero hay mucho más donde elegir. Este disco, cuidado al detalle, es ideal para descubrir a Sloan, ya que ninguno de sus siete discos ha aparecido en España. Imprescindible e inmejorable.

16 diciembre 2005

THE POSIES + Beezewax (7-12-05) Arena - Madrid

De nuevo juntos Ken Stringfellow y Jon Auer para resucitar a The Posies tras su separación en 1998 y presentar un nuevo disco "Every Kind Of Light" acompañados en esta nueva etapa por un correcto Matt Harris al bajo y un potente Darius Minwalla a la batería. 

El sonido de la sala no hizo justicia al buen momento de la banda, que parece querer recuperar el tiempo perdido por la entrega que demostraron, no quedando claro el juego de guitarras entre Jon y Ken, uno de sus puntos fuertes, aunque según pasaban las canciones, salvo el desmadre ruidista último, parece que mejoró algo el sonido. De todos modos el personal disfrutó con las habituales gestos y locuras de Stringfellow y los vuelos de guitarra de Auer. 

The Posies que en sus discos de estudio destacan con excelentes composiciones de power-pop guitarrero de melodías, en directo se transforman en una auténtica banda de rock, dándole un punto de energía extra a todas las canciones, como hicieron aquí atacando con ganas y rabia en el reencuentro las incluidas en sus discos imprescindibles: "Frosting On The Beater" y "Amazing Disgrace". Comenzaron tocando algunas de este último como "Daily mutilation" para enseguida presentar nuevas del último disco, para a partir de ahí no parar, intercalando clásicas de lo discos citados. 

Los momentos salvajes, típicamente posies, llegaron cuando ambos guitarristas se bajaron del escenario para mezclarse con el apretujado público, mientras tocaban "Dream all day" y seguidamente "Flavor of the month". Hasta los bises, volvieron con "Somehow Everything", no aparecieron canciones de "Sucess" ofreciendo, para acabar, una nueva sesión de salvajismo con "Everybody is a fucking liar" y la guinda final con Stringfellow en una última aparición desbaratando el teclado y tirando el micro al aire vestido únicamente con una ajustada y ridícula braga de bikini.¡ En fin ! el batería, con cara de desconcierto cuando se iba, estaba igual de alucinado que el público. 

Un nuevo espectáculo musical y escénico de los de Seattle que como muchas otras veces, antes del concierto (aunque también después), estaban hablando con los fans, vendiendo discos y agotando las existencias de camisetas del grupo mientras actuaba los teloneros Beezewax, banda noruega en la extensa nómina de bandas en las que ha colaborado Strigfellows, que agradaron al público en la presentación de su último disco "Who To Salute".

MANU CHAO * DESTINACION ESPERANZA - Phillipe Manche (Seix Barral)

En un periodo de merecido descanso mediático de Manu Chao, imagino que escondido en la cotidianeidad de su barrio de Barcelona o Río de Janeiro, aparece este libro de entrevistas en el que el periodista belga Phillipe Manche, decide publicar a modo de biografía sus conversaciones informales con su amigo Manu Chao y es que éste, allá donde esté deja huella y convierte en amigos a gran parte de las personas que le rodean profesionalmente, músicos, promotores, periodistas... 

Se va ampliando la bibliografía sobre este trotamundos cuya disposición para hablar en cualquier momento y en cualquier lugar, dificulta el trabajo de sus biógrafos. Siempre cercano a la gente, hablando con los fans después de los conciertos, actuaciones casuales en bares, hablando sin cortapisas de cualquier tema en multitud de medios de comunicación... es esa máxima accesibilidad, precisamente, la que hace de Manu una persona ¡ tan cercana ! que prácticamente lo sabemos todo sobre él, lo sabemos porque ya nos lo cuenta el mismo, casi personalmente. 

"No separo. Mi trabajo es mi pasión y mi pasión a la fuerza está ligada a mi vida privada. No hay diferencia, salvo para los periodistas. Cuando me hacen preguntas sobre mi chica y tal les contesto que no es asunto suyo. No tienen más que escuchar las canciones... Pero no les pienso decir cuáles. Les digo lo siguiente: Mi vida está en mis canciones"  

Las primeras entrevistas-capítulos datan del periodo Mano Negra 1989-1991, aunque el grueso del libro transcurre en el periodo el solitario a partir de 2001, previo reencuentro entre atrista y periodista en 1998. El periodo latinonamericano de los 90' no queda reflejado en la inmediatez de la entrevista personal. Si se quiere completar es muy recomendable leer "Tren de sangre y fuego. Mano Negra en Colombia" que a modo de diario de viaje escribió Ramón Chao padre de Manu sobre el periplo músico-circense del grupo en dichas tierras. 

Este libro no es pues una obra "reveladora" (salvo para los no iniciados), pues sus seguidores ya conocemos además lo que sobre Manu escribieron el italiano Alessandro Robecchi en 2002 o el argelino Souâd Belhaddad en 2003, aunque si muy interesante como testimonio en primera persona en encuentros relajados y a veces fortuitos, y destacando sobre todo como el propio entrevistador va descubriendo, más que conociendo, al personaje año tras año con sus ilusiones, decepciones, contradicciones, cambios... y como hace que el lector se identifique más que con la vida de Manu, que también, con ese descubrimiento que va haciendo el periodista. 

Se refleja en estas entrevistas las relaciones personales, la convivencia, el compromiso, ... ya sea en una banda en gira o con los vecinos de tu barrio como primera estación a la esperanza. Emotivos y originales los momentos en que se habla de Joe Strummer para quien está dedicado el libro cuya edición, cuidada en presentación y datos, discográficos y bibliográficos, carece de imágenes. Extraño no parece difícil encontrar fotos inéditas o poco conocidas de Manu accesible también en este aspecto.

06 diciembre 2005

NADA SURF + Howie Beck (3-12-05) Arena (Madrid)

Con el cartel de no hay entradas y con mucha gente en la calle buscando alguna hasta la desesperación, se prometía caliente la actuación de Nada Surf. Así fue, presentaban su último disco "The weights is a gift" y el trío neoyorkino-madrileño formado por Ira Elliot a la batería, Daniel Lorca al bajo y Matthew Caws en voz y guitarra, no desaprovechó la oportunidad para hacer de este momento una auténtica fiesta desde el principio, con una sala abarrotada y sin tregua hasta el final. 

Hacia tiempo que no veía una petición de bises tan intensa, tuvieron que salir dos veces. Uno tras otro y casi sin parar fueron sonando sus canciones más reconocibles entre las que pronto apareció el single de su último disco "Always love" una canción reconfortante en el medio tiempo y llamada a clásico. Sorprendente Matthew que consiguió llevar la máxima energía con su guitarra adaptándose a todo tipo de registros. Sin apenas parar, cada canción superaba en intensidad a la anterior, tan solo algunos respiros aunque ya en los bises "Inside of Love", "Blonde on Blonde".

La actuación se desarrolló en una especie de demostración hacia ellos mismos de que podían dar aun algo más. El público reconoció su esfuerzo entusiasmado y no paraba de hacer peticiones y saltar enloquecido hasta el momentos en que ya acabando tocaron una emocionante "Hyperspace" en estallido de sonido final. En plena fiesta y muy agradecidos acabaron con "Love Will Tear Us Apart" de Joy División. Uno de esos conciertos plenos que te llena y a la vez deja cn ganas de más. Muy buen directo. 

Teloneó Howie Beck, que vino sin banda, sólo con su guitarra y armónica y al que el personal no hizo apenas caso, se oía más a la gente hablar expectante sobre lo que estaba por llegar que a él cantar, sólo se giraron las cabezas cuando en su última canción, Nada Surf pusieron sus instrumentos al servicio del canadiense. Este luego les devolvería la cortesía en plena actuación surfera.

MERCURY REV - THE DIRTY THREE - THE DECEMBERIST (25-11-05) Aqualung - Madrid

Cuarto y último de los conciertos Wintercase de ese año. En principio surgían dudas con Mercury Rev, tras un último disco "The Secret Migration" que venían a presntar y del que no parece que este a la altura o cerca de los anteriores. ¿Posible banda acomodada en declive?

Desde le primer momento se despejaron las dudas. Las canciones de este último disco mejoran en directo, destacando "Secret for a song" o "In a funny way" (abriendo bises), aunque los mejores momentos llegaron centrándose en el repertorio clásico con los esperados "Opus 40", "Everlasting arm" o "Holes" interpretadas fielmente a sus originales en disco, sonido claro aun en distorsones, olvidando pasados experimentos sonoros.

Momentos mágicos con un Jonathan Donahue pletórico, coqueteando con el histrionismo y más vampírico que nunca, cual Nosferatu, resultado del juego de luces azulado y una puesta en escena detallada donde los mensajes e imágenes no dejaron de aparecer durante toda la actuación. Música de cuento dijo alguien cercano acertadamente, música para soñar dirían otros. Emoción en un ambiente de complicidad velada que se desbordó con "The dark is rising" en un final orquestal espectacular.

Anteriormente tuvimos la oportunidad de escuchar a The Dirty Three, trío australiano de culto que en el lejano 1994 ya actuaron en nuestro país junto a los mismos Mercury Rev y Pavement entre otros, y que su cantante-violinista, Warren Ellis (nuevo miembro de los Bad Seeds de Nick Cave), muy dicharachero toda la noche, nos recordó. Concierto alucinado y alucinante que nos dejó con la boca abierta. Un especie de punk-folk progresivo e hipnótico en el que Ellis, con una imagen de andar por casa, melenas a lo Zappa y camisa y rebeca de la abuela, no paraba de distorsionar su violín mientras daba patadas al aire, para apaciguar después con tensos momentos de calma. Increibles ... ¡ nadie se ha fijado en ellos en tanto tiempo ! ¡ con tantos festivales !

Para finalizar, decir que no llegué a tiempo para ver a The Decemberist. Agradecer de nuevo al faraónico y ególatra Gallardón las imprevisibles y nada planificadas obras que asolan cualquier resquicio de la capital, por más que te prepares para el el atasco, este te atrapa en espacio y tiempo.

03 diciembre 2005

THE WEDDING PRESENT + Murmur (23-11- 05) Arena - Madrid

En una sala que se preveía bastante más abarrotada, se produjo la esperada actuación de la reaparecida banda liderada por David Gedge que presentaba su último disco "Take Fountain", aunque en realidad la hora y cuarenta minutos largos que duró el concierto se convirtió en un repaso a su extensísimo repertorio que, desde finales de los ochenta y durante los noventa, agitaron el "indie-rock" internacional. 

Moviéndose entre guitarras aguerridas y energéticas, las canciones sonaron luminosas en medios tiempos y electrizantes en los acelerones. Realmente fueron pocos los momentos de respiro pues las canciones más pausadas fueron escasas, predominando los pequeños himnos frenéticos a dos guitarras. Los clásicos más reconocibles se alternaron sin tránsito con las nuevas canciones, "Ringway to Seatac" un auténtico trallazo en la despedida, bien podría pertenecer a su primera etapa. 

Tampoco se olvidó Gedge de su anterior proyecto "Cinerama" del que interpretó algunas canciones, más elaboradas pero menos directas. The Wedding Presents, junto a Teenage Fanclub y Go-Betweens, a ambos les hemos podido ver en directo también este mes, nos han devuelto a la intensidad y energía de los directos de guitarras, emotivos pero sin pose, sin melodramas trascendentales pero mostrándonos los lados amables del ruido, los espacios sensibles y la alegría cotidiana. Cómplices con su público. Algo a lo que nos estábamos desacostumbrando desde que en los noventa se impusieran las estéticas de pop británico. 

Telonearon Murmur banda madrileña con cantante inglés al frente, cuyas maquetas han sido muy bien recibidas (finalistas de varios concursos) y que pronto darán el salto al estreno discográfico. Canciones atmosféricas y contrastes entre diferentes ambientes.

02 diciembre 2005

SAPIENS - Piensa (Astro Discos)

Lo primero que sorprende del debut de este cuarteto madrileño, es la madurez a la hora de abordar una serie de sonidos nada fáciles, también y ¡sobre todo! el planteamiento como banda. Sin prisas pues llevan años de ensayo y muchísimo trabajo, lograron con la ayuda de Raúl Santos, su productor, grabar este disco. 

Ocho canciones de largo recorrido por las cuales se van solapando contundentes desarrollos junto a momentos intensos e hipnóticos. Utilizan para ello muchos y muy cuidados matices, tanto de guitarras como de teclados, ocupando y cediendo protagonismo según momentos. 

Uso también certero de samples y efectos junto a baterías sordas y percusiones variables. Prácticamente instrumentales la voz se trata como si fuera uno más y son muchos los pasajes en los que aparecen voces de películas y discursos con más o menos efectos. Un disco con todo tipo de arreglos, sobre todo los de trompeta y percusiones (tribales en algunos momentos) con los que consiguen momentos álgidos importantes que, reitero, dan al disco un carácter impropio de un estreno y muy personal. 

Suenan muy bien aun cuando en algunos momentos se enzarzan en un muro de ruido complicado. Una banda que se declara identificada con Shellac, el proyecto post-harcore del archiproductor Steve Albini, pero que trascienden lo musical pues para disfrutar y/o entender las canciones hay que verlos en directo, nos dicen ellos.

Realmente el quinto Sapiens es igual de importante (uno más) en labores de proyección de imágenes durante toda sus actuaciones. Muy influenciados por el expresionismo alemán, sus miembros tienen todos relación con el mundo audiovisual, se nota también en la elección de la portada, grafías y diseños que acompañan el disco. 

Mención especial a la canción "Real de 14" la única que se sale de la línea del disco pues es una historia (viaje de peyote en ese mítico lugar mexicano) a la que se le fueron uniendo los sonidos más experimentales pensando en que no se incluiría en el disco. Acertadamente al final quedó incluida siendo incluso, en la parte sonora, una especie de muestra de lo que hemos ido escuchando a lo largo del disco. 

Curioso caso el de esta banda instrumental que consigue de forma muy sutil (título del disco, voces que se cuelan como arreglos...) ser una banda comprometida con el tiempo en el que viven, aun cuando no se declaran como tal, es quizás ese uno de sus mayores méritos. Con arengas sonoras, sin palabras...